ESCUELA NORMAL PREESCOLAR
“ADOLFO VIGURI VIGURI”
CLAVE: 12DNL0005E
CURSO:
ATENCION A LA DIVERSIDAD.
ALUMNA:
Zully Baylón Sánchez.
GRUPO: 502 QUINTO SEMESTRE
COORDINADORA:
Monica Elinor Salinas Leyva.
CICLO ESCOLAR: 2018-2019
CHILPANCINGO, GRO. Octubre del 2018
Situación didáctica 2. La educación de los alumnos
con discapacidad: un compromiso histórico del sistema educativo.
2.1 IDEAS
CLAVES EL CASO DE MIGUEL
UNESCO (1994). “Las necesidades
especiales en el aula”
- La aplicación de etiquetas hace que muchos profesores protejan excesivamente a algunos de sus alumnos. No cabe duda de que toda enseñanza debe comprender cierto cuidado, pero hay que precaverse del peligro de subestimar lo que el niño puede lograr.
- En muchas escuelas se suele brindar a los niños que adolecen de necesidades una ayuda adicional en las áreas en que experimentan dificultades.
- Si bien es inevitable que la enseñanza consista en parte en organizar el aprendizaje de un gran nuero de alumnos, el cometido del profesor debe ser encontrar medios de tener suficientemente en cuenta a cada de sus alumnos. Esto requiere sobre todo cierta atención. Es preciso reconocer la individualidad de cada niño y ser considerada como una cualidad positiva.
- Si bien destacamos la idea de que los profesores deben aprender de su propia practica y, en lo posible, tratar de mejorarla trabajando con otros colegas.
- El enfoque adoptado en los materiales “las necesidades especiales en el aula” se basa en la convicción que desde el punto de vista curricular, las dificultades educativas pueden conducir a mejorar la calidad de la educación. Así pues, las necesidades especiales son especiales por cuanto aportan ideas sobre las posibilidades de mejoramiento que de otro modo pasan desapercibidas
Álvaro
Marchesi “Del lenguaje de la deficiencia a las escuelas inclusivas”
- El déficit no es ya una categoría con perfiles clínicos estables, sino que se establece en función de la experiencia educativa. El sistema educativo puede, por tanto, intervenir para favorecer el desarrollo y el aprendizaje de los alumnos con alguna característica «deficitaria».
- Las escuelas ordinarias tienen que enfrentarse a la tarea de enseñar a todos los alumnos y constatar las grandes diferencias que existen entre ellos. La generalización de la educación secundaria conduce a un replanteamiento de la escuela, que debe ser comprensiva, es decir, integradora y no segrega dora.
- Los limitados resultados que las escuelas de educación especial obtienen con la mayor parte de los alumnos conduce a volver a pensar su función.
- La elección del término de necesidades educativas especiales refleja el hecho de que los alumnos con discapacidad o con dificultades significativas de aprendizaje pueden presentar necesidades educativas de diferente gravedad en distintos momentos del tiempo. Existe, en consecuencia, un continuo de alumnos que manifiestan necesidades educativas especiales en algún momento a lo largo de su escolarización.
- Un alumno con necesidades educativas especiales presenta algún problema de aprendizaje a lo largo de su escolarización que demanda una respuesta educativa más específica. AI hablar de dificultades en el aprendizaje escolar, y evitar el lenguaje de la deficiencia, el énfasis se sitúa en la escuela, en el tipo de respuesta educativa. el acento está ahora en la capacidad del centro educativo para adaptar sus enseñanzas a las necesidades de estos alumnos y ofrecer, de esta forma, una respuesta satisfactoria.
- La finalidad principal de la valoración del alumno es analizar sus potencialidades de desarrollo y de aprendizaje, y determinar al mismo tiempo que tipo de enseñanza necesita y que recursos suplementarios son precisos para conseguir una mejor educación en el contexto más integrador posible. Este planteamiento abre muchas más posibilidades a la integración de estos alumnos en la escuela ordinaria.
- El movimiento hacia las escuelas inclusivas procede en gran medida del campo de la educaci6n especial y se ha planteado para conseguir un cambio profundo en la educaci6n que sea capaz de integrar a todos los alumnos
- El concepto de necesidades educativas especiales remite a la provisión de recursos educativos que son necesarios para atender esas necesidades y reducir las dificultades de aprendizaje que pueden presentar esos alumnos. Los recursos educativos pueden ser muy variados y su referente inmediato es el mayor número de profesores especializados o profesionales específicos que han de cooperar para que estos alumnos puedan acceder al currículo. Sin embargo, los recursos pueden ser de muy diversos tipos: materiales curriculares, supresión de barreras arquitectónicas, adaptación de edificios, sistemas de comunicación alternativos o cualquier otro medio educativo de carácter extraordinario.
Gerardo Echeita (2006). “Educación para la Inclusión
o Educación sin exclusiones”
- La lucha y el esfuerzo de las personas con discapacidad y de las organizaciones que las representan por variar este panorama se remonta a la década de los años setenta y desde entonces y hasta hoy ha sido clave el concepto de integraci6n (social, laboral, educativa,...), del que con suma frecuencia lo que más se ha resaltado es su dimensión ética, el derecho a ser admitido, a estar en los mismos espacios o a disfrutar de los mismos servicios que el resto de la población sin discapacidad
- La educación inclusiva es una cuestión de valores, una opción sobre la educación que queremos para nuestros hijos y sobre el tipo de sociedad en la que nos gustaría vivir.
- La educación escolar puede y debe jugar un papel decisivo para que la nueva sociedad de la información en la que estamos viviendo no se configure también como una sociedad de desigualdad, de guerra y de exclusión. Para ello, creo que haríamos bien en seguir los requerimientos de una educaci6n más inclusiva.
- La participación de los miembros de la comunidad educativa en las decisiones que afectan a su centro. La dirección, el profesorado, las familias deben tener espacios y tiempos para consolidar su autonomía y para reflexionar sobre las estrategias educativas que proporcionen un mayor valor al proceso de enseñanza-aprendizaje.
- La educación inclusiva no tiene que ver, de entrada, con los lugares. Es, antes que nada, un valor y una actitud personal de profunda respeto por las diferencias y de compromiso con la tarea de no hacer de ellas obstáculos sino oportunidades.
- Ocurre que los sistemas educativos son en sí mismos la primera fuente de exclusión social a través de distintas situaciones que, además con harta frecuencia, multiplican sus efectos negativos. Así tenemos en primer lugar la situación de aquellos países cuyos sistemas educativos, por su propia debilidad, no pueden ofrecer una educación básica a su población escolar
- "Inclusión es un proceso. La educación inclusiva no es algo que tenga que ver meramente con facilitar el acceso a las escuelas ordinarias a los alumnos que han sido previamente excluidos. No es algo que tenga que ver con terminar con un inaceptable sistema de segregaci6n y con lanzar a todo ese alumnado hacia un sistema ordinario que no ha cambiado. El sistema escolar que conocemos -en términos de factores físicos, aspectos curriculares, expectativas y estilos del profesorado, roles directivos- tendrá que cambiar. Y ello porque educación inclusiva es participaci6n de todos los niños y jóvenes y remover, para conseguirlo, todas las practicas excluyentes".
- La preocupación por los factores organizativos en el ámbito escolar contribuye decididamente a resituar el análisis de cómo atender a la diversidad del alumnado, en un marco más global y sistémico de los que hasta entonces habían predominado (centrado en lo individual primero y en lo curricular después)
Del índice de Inclusión
Booth y Ainscow (2000)
- La inclusión y la exclusión se exploran a través de tres dimensiones interrelacionadas en la vida de las escuelas: culturas, políticas y prácticas
- Existen escuelas donde no se aplican algunos indicadores, como por ejemplo, aquellas que atienden sólo a niños o a niñas; o centros educativos religiosos que no permiten incluir a todo el alumnado de su localidad con distinto credo religioso. Pero a pesar de estas limitaciones, estas escuelas generalmente están dispuestas a realizar un plan de desarrollo con una orientación inclusiva y, por tanto, podrán adaptar los indicadores y las preguntas a sus propósitos y características propias.
- El trabajo con estos materiales facilite que las escuelas y la administración educativa trabajen juntos de manera constructiva, para que se elaboren planes que conduzcan a una mejor atención al alumnado con necesidades especiales y a la definición de políticas de admisión de alumnos que alienten la participación de todos los estudiantes de su localidad.
- La inclusión significa que los centros educativos se comprometan a realizar un análisis crítico sobre lo que se puede hacer para mejorar el aprendizaje y la participación de todo el alumnado en la escuela y en su localidad.
- La “inclusión” o la “educación inclusiva” no es otro nombre para referirse a la integración del “Alumnado con Necesidades Educativas Especiales”. Implica un enfoque diferente para identificar e intentar resolver las dificultades que surgen en las escuelas. El concepto “Necesidades Educativas Especiales” no se utiliza en este documento porque consideramos que el enfoque con el que se asocia tiene limitaciones como modelo para resolver las dificultades educativas y puede ser una barrera para el desarrollo de prácticas inclusivas en los centros educativos.
- Al “etiquetar” a un alumno con “Necesidades Educativas Especiales” se generan expectativas más bajas. Además, el hecho de centrarse en las dificultades que experimentan los alumnos que están “etiquetados” puede desviar la atención de las dificultades que experimentan otros alumnos. Por otro lado, tiende a reforzar en los docentes la creencia de que la educación del alumnado clasificado como “con Necesidades Educativas Especiales” en sus clases es, fundamentalmente, responsabilidad de un especialista.
- Las barreras, al igual que los recursos para reducirlas, se pueden encontrar en todos los elementos y estructuras del sistema: dentro de las escuelas, en la comunidad, y en las políticas locales y nacionales. Las barreras pueden impedir el acceso al centro educativo o limitar la participación dentro de él.
- Las discapacidades son barreras a la participación del alumnado con deficiencias o enfermedades crónicas. Las discapacidades se crean en la interacción entre actitudes, acciones, culturas, políticas y prácticas institucionales discriminatorias con las deficiencias, el dolor o las enfermedades crónicas.
- La deficiencia se puede definir como “una limitación permanente de la función física, intelectual o sensorial”, aunque la noción de una deficiencia intelectual es problemática, ya que puede sugerir una injustificable base física a las dificultades.